Zaraobe: 57

Marianistas: 61

Habíamos jugado la primera vuelta y habíamos ganado tres partidos por menos de cinco puntos.

Hoy ha salido cruz. Hemos perdido de cuatro y esta derrota no hace sino ratificar lo escrito sobre este equipo en crónicas precedentes.

Este equipo es bueno si defiende a muerte. Si no lo hiciéramos así, podríamos perder contra cualquiera.

Hemos jugado tres cuartos primorosos en ataque y hemos jugado un mal cuarto en defensa. Resultado, derrota.

Pero no vamos a darnos latigazos como los picados de San Vicente, no procede.

No tenemos pecados que expiar. Como mucho, alguna falta que no merece confesión.

La Semana Santa me afecta, como podéis ver.

El partido ha sido trepidante y se nos ha ido en los últimos segundos, a pesar de lo que Bea pueda pensar. El resultado de hoy solo es fruto de los caprichos del deporte.

Ya me gustaría a mí tener un timonel como Bea, y no es peloteo. Hoy estaba afectada como todos, incluso la que más diría yo, y eso es la clase de compromiso que uno quiere para sus jugadores.

Seguimos siendo el cadete escolar, el equipo revelación del club, junto con el infantil femenino de primer año.

Nadie daba un duro por nosotros. Quizá ni nosotros mismos, pero nos hemos ganado el respeto de todos y todas por nuestro trabajo diario.

Así que solo queda recuperar a los lesionados y pasarlo bien en Oropesa, disfrutando del balón anaranjado.

Y quiero que sepáis, que cuando no voy con el equipo, me siento como el novio o la novia de los toreros. Esperando los parciales que manda Óscar y comiéndome los higadillos por no poder ayudar.

Fdo. Imanol Arberas.

Aupa Zaraobe.